Con el paso de los años sufrimos un proceso de deterioro cognitivo que debemos conocer, porque es un proceso natural que puede traer cambios en la memoria sobre como nuestro cerebro almacena la información que sino se detectan a tiempo pueden empezar a producir olvidos leves de corto o largo plazo.
La memoria reciente es la primera en verse afectada; como por ejemplo, olvidando nombres de personas recién conocidas o cosas que acabamos de hacer o de decir.
Cuando estos cambios son muy evidentes afectando nuestro día a día, e implican cambios de importancia en la memoria, el comportamiento y la personalidad, es necesario visitar al médico ya que se pueden considerar como indicadores de demencia, alzheimer o demencia senil o vascular.
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